El entorno del fallecido opositor ruso Alexei Navalny dijo que había negociaciones muy avanzadas para liberarlo en un canje de prisioneros, cuando el activista murió en una cárcel del Ártico el pasado 16 de febrero. Según Maria Pevchikh, la directora de la Fundación Anticorrupción de Navalny, el opositor iba a ser canjeado junto a "dos ciudadanos estadounidenses" detenidos en Rusia por un ruso encarcelado en Alemania. Las circunstancias de la muerte de Navalny siguen sin estar esclarecidas y varios países, incluyendo EE.UU. señalaron como responsable al presidente ruso, Vladimir Putin.