Miles de islandesas, entre ellas la Primera Ministra, no trabajaron este martes y participaron en manifestaciones por todo el país para condenar la brecha salarial y la violencia de género, coincidiendo con el aniversario de una histórica protesta realizada hace medio siglo. El denominado Día Libre de las Mujeres, al que un 24 de octubre de 1975 se unió el 90 por ciento de la población femenina para reivindicar su trabajo y denunciar las diferencias de salario y de trato laboral, se ha conmemorado media docena de veces, pero no con una convocatoria tan amplia como la de este año.