Tras recibir a las delegaciones extranjeras, el flamante presidente Javier Milei salió al balcón de la Casa Rosada para hablarle a sus seguidores. Allí volvió a insistir que ellos van a tener que soportar "período de dureza" pero que "vamos a salir adelante". También repitió el mantra de los cien años de decadencia y la pesada herencia y cerró con una cita religiosa: "Que Dios nos bendiga y que las fuerzas del cielo nos guíen en hacer el mejor gobierno de la historia".