En la reunión Lula confirmó que su excanciller y asesor especial, Celso Amorim, participará del proceso de Copenhague sobre la búsqueda de un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania. El canciller Mauro Vieira dijo que el encuentro se dio "en un ambiente tranquilo y amigable, en el que intercambiaron información sobre cada uno de los países y la situación que vive el mundo en estos momentos". Vieira recordó que Brasil sigue en contacto con el gobierno del presidente Vladimir Putin y que debe reunirse en las próximas horas con su par ruso, el canciller Serguei Lavrov. El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmitro Kuleba, dijo luego de la reunión: "Podría usar la expresión poco diplomática de 'romper el hielo'. No quiere decir que hubiera hielo entre nuestros países, pero era un ambiente cálido y honesto. Creo que ahora ambos presidentes entienden mejor las posiciones de cada uno".