La masiva manifestación convocada por organismos relacionados con la actividad audiovisual argentina, y acompañada por representantes de otras disciplinas artísticas, movimientos sociales y partidos políticos, terminó al gusto de Javier Milei y Patricia Bullrich: con represión, gases lacrimógenos, detenidos y un ciclista atropellado por un conductor que intentó darse a la fuga y terminó chocando con otro vehículo.