Monseñor Carlos Tissera: “con este porcentaje de pobreza que hay, solucionar el tema alimentario es el principal problema de todos”

Una semana antes de que se concrete el encuentro entre el papa Francisco y el presidente Javier Milei, el gobierno nacional anunció el envío de dinero a la organización católica Cáritas destinados a sus comedores. La institución agradeció los 310 millones pero advirtió que no eran los únicos intermediarios con los sectores más desprotegido. Una forma de decirle al Ministerio de Capital Humano que no discriminen a las organizaciones sociales. Ante la decisión de la ministra Sandra Pettovello de ignorar a esas organizaciones, el presidente Cáritas y obispo de Quilmes, Carlos Tissera, le pidió al gobierno "que recapacite" y que "se sienten en la mesa otras organizaciones sociales". El pedido de Tissera marca una de las contradicciones más concretas del gobierno de Milei. Desde un principio Pettovello advirtió que no tendría charla con "los intermediarios" de "los que tienen hambre" sino que atendería a los beneficiarios directos de la ayuda estatal. Lo hizo hace diez días cuando rechazó a las organizaciones que llegaron hasta la sede de su ministerio. Ese día les dijo que solo atendería de manera individual. Una fila de más de 30 cuadras de gente que va a los comedores la esperó días después en la sede ministerial. La funcionaria no apareció porque estaba firmando un acuerdo con una organización de iglesias evangelistas que alimentan a pobres. Es decir, firmaba un convenio con intermediarios. Luego hizo lo mismo con Cáritas que, a diferencia de sus colegas evangelistas, advirtió del error a la ministra. Pettovello se mantuvo en su postura de ignorar a las organizaciones sociales.