Un total de 23 de los 35 hospitales de toda la Franja colapsaron totalmente, mientras los doctores deben realizar operaciones sin anestesia. En Al Shifa "los heridos, enfermos y el personal médico no tienen nada que comer", mientras las fuerzas israelíes "bombardean los pozos de agua y estaciones de oxígeno, y las reservas de sangre ya no se pueden usar debido al corte eléctrico" que impidió su refrigeración, explicó el ministerio de la ANP. Richard Hecht, vocero del Ejército israelí, dijo este domingo que, "conscientes de la situación de energía del hospital" y del estado de los 36 bebés en las incubadoras, las tropas llevaron 300 litros de combustible hasta las puertas de Al Shifa. "Si toman el combustible, pueden darles el tiempo y la energía que necesitan. Tristemente hasta ahora no han tomado el combustible. Podría ser Hamas impidiéndoles que lo hagan, eso es lo que asumimos que está sucediendo", sostuvo Hecht.