En una final infartante, el Frente de Todos logró aprobar, por un pelo, el pliego de la jueza Ana María Figueroa para que continúe en su cargo por cinco años más. Con 35 votos a favor y 35 en contra, la votación terminó en un empate. Tuvo que repetirse y ante un similar resultado la presidenta provisional del Senado, Claudia Ledesma Abdala tuviera que desempatar en favor del oficialismo. En la bancada frentetodista no esperaban un resultado tan justo: la maniobra de dos senadores de Juntos por el Cambio de aprovechar la ausencia momentánea de senadores oficialistas entre las bancas para imponer que el pliego de Figueroa se votara por separado del resto de los acuerdos judiciales los agarró desprevenidos. Incluso hubo aliados, como la misionera Magdalena Solari Quintana, que se ausentó al momento de la votación. Había dudas, a su vez, sobre si les peronistas de Unidad Federal acompañarían, aunque finalmente así lo hicieron y terminaron inclinando la balanza en favor de la jueza de Casación Penal.