La Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley que faculta a la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP) como máximo a realizar disparos intimidatorios contra aeronaves sospechosas y no identificadas, entre ellas las narcoavionetas. Cercenaron el proyecto inicial que permitía el derribo de estas aeronaves, volviéndose prácticamente inútil.