Ana Paula Blaires Capdevila padece de una miocardiopatía obstructiva que se le detectó en abril pasado. Desde entonces, sus familiares lucharon por un donante. Hace 80 días, desde el 1 de agosto de este año, sobrevive con un corazón artificial en el Hospital Pediátrico Acosta Ñu. Y anoche recibió un nuevo corazón producto de la donación. En horas de la tarde, sus padres Sergio Blaires y Norma Capdevila recibieron la información de que había un donante. Se la preparó a Anita y entró a quirófano. Ella salió de cirugía en horas de la madrugada y se aguardará hasta el lunes por la reacción y la evolución.