El Departamento de Asuntos de Veteranos de EE.UU. planea una reestructuración que implicará el recorte de 80,000 puestos de trabajo para reducir su personal a niveles de 2019. Esta medida, impulsada por la Administración Trump, busca optimizar costos tras la expansión del departamento bajo la administración Biden, incluyendo la cobertura de veteranos afectados por fosas tóxicas bajo la Ley PACT de 2022. La reestructuración se coordinará con el Departamento de Eficiencia Gubernamental de la Casa Blanca, dirigido por Elon Musk. Mientras los veteranos protestan contra los recortes y los demócratas los critican, los republicanos observan con cautela. El senador Richard Blumenthal acusa a la administración de priorizar intereses privados sobre la atención a los veteranos.