Francisca tuvo una conversación sincera con su madre, Divina, en la que ambas revivieron los momentos difíciles de su infancia. Durante la charla, su madre le pidió disculpas por los errores del pasado, reconociendo que hizo lo mejor que pudo con las herramientas que tenía. Francisca también habló sobre la dura situación familiar que vivieron y agradeció a su madre por haberla convertido en la mujer fuerte que es hoy.