Donald Trump considera que la inmigración es el tema que más preocupa a los estadounidenses, por encima de la economía, aunque las encuestas de Gallup muestran que la economía sigue siendo el principal tema de interés para la mayoría. Durante su discurso en Greensboro, Carolina del Norte, Trump propuso la pena de muerte para los migrantes que asesinen a ciudadanos estadounidenses o agentes del orden. Además, prometió deportaciones masivas y condenas de 10 años para aquellos que reingresen al país tras ser expulsados, a la vez que criticó a Kamala Harris y su manejo de la frontera.