Una caravana de alrededor de 7.000 personas partió desde Tapachula con rumbo a Estados Unidos, con la incertidumbre de lo que les puede esperar cuando lleguen a la frontera. Personas de Honduras, Venezuela, Haití, Cuba, El Salvador y Guatemala buscan en el país norteamericano una mejor calidad de vida, ya que en sus países de origen no encuentran empleo y temen por la alta inseguridad.