Desde muy temprano, en horas de la madrugada, se registra a varias personas haciendo una larga cola para ingresar al santuario de Santa Rosa de Lima. A pesar del frío y del sueño, los fieles tienen la costumbre de madrugar para hacer un agradecimiento, pedir un deseo o promesas a la Santa Patrona del Nuevo Mundo, Filipinas y las Indias Orientales. (Fuente: Latina TV)