Julio Enciso tuvo en sus pies lo que pudo haber sido el primer gol de Paraguay frente a Venezuela, pero el penal que pateó terminó en las manos del arquero venezolano. Al terminar el partido, delantero del Brighton pidió perdón a la afición y dijo que sus ansias de convertir un gol lo traicionaron; admitió que pidió ser cambiado porque sintió que perdió el enfoque.