Armando Javier Rotela y otros 8 miembros de su grupo criminal fueron trasladados a la cárcel de Emboscada después del éxito de la operación Veneratio. El comandante de la Policía Nacional, Carlos Benítez, comentó que el jefe del Clan Rotela y sus secuaces están separados para evitar la ejecución de planes desde el interior de la cárcel. La captura de Rotela significó la recuperación del principal centro de reclusión del país: la cárcel de Tacumbú. Cabe destacar que el criminal intentó resistirse durante el operativo Veneratio, utilizando incluso a una mujer embarazada como escudo para iniciar negociaciones con el gobierno, situación que no prosperó.