Luego de tocar tierra la semana pasada en el estado de Florida, el huracán Helene perdió potencia y se convirtió en tormenta, sin embargo, los daños que ha dejado con su paso han sido devastadores. Más de 100 personas fallecidas y otras desaparecidas han sido las consecuencias de la tormenta, además de inundaciones y destrucción de viviendas, carreteras y negocios. Las autoridades aún se encuentran restableciendo el sistema de electricidad, mientras que el presidente Joe Biden aseguró la ayuda del Gobierno federal para los damnificados.