La ameba devoradora de cerebros es un organismo vivo unicelular que habita en ambientes cálidos de agua dulce, pudiendo causar infecciones cerebrales mortales. El Departamento de Salud Pública de Georgia en EE. UU. reportó la muerte de un paciente por esta ameba y tan solo unos días después se registró otra muerte relacionada en Nevada. Las autoridades sanitarias norteamericanas se encuentran en alerta máxima, advirtiendo a sus ciudadanos para evitar acciones relacionadas con el agua que sean potenciales focos transmisores.