En la noche del 276 de septiembre y la madrugada del 27, 43 estudiantes normalistas desaparecieron de manera forzada. Hasta el momento, el crimen de Estado no ha arrojado respuestas, aunque se ha vuelto un caso en que se ha visto involucrada la corrupción e impunidad. Los padres de familia continúan luchando por encontrar a sus hijos, de quienes no tienen respuesta desde hace nueve años.