La acusación presentada por el fiscal Deny Yoon Pak afirma que la participación de Miguel Insfrán Galeano, también conocido como Tío Rico, consistió mayormente en brindar la logística necesaria que el supuesto narcotraficante ahora prófugo Sebastián Marset requería, para concretar el traslado de las cargas de cocaína hasta su destino final, generalmente Europa y África. Estas serían las conversaciones que aparentemente salieron de Paraguay.