La magnitud de la devastación por los incendios en Hawái es colosal. Más de 2.200 edificios, principalmente residencias, han sido destruidos, y las estimaciones preliminares sitúan los daños económicos en miles de millones de dólares. Los esfuerzos en los operativos de búsqueda y rescate están a toda marcha, apoyados con hasta 20 equipos de caninos recorriendo las calles arrasadas por el fuego.