La Cámara de Diputados de México aprobó el 4 de septiembre la controvertida reforma judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador, que propone la elección popular de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte. Una jueza en Morelos ordenó suspender la discusión en el Senado, pero la reforma ya pasó en la cámara baja con 359 votos de Morena y aliados contra 135 de la oposición. La reforma reduce de once a nueve los ministros de la Corte, acorta sus periodos, elimina pensiones vitalicias y hace públicas las sesiones.