Un nuevo reporte del CDC demuestra que, contrario a los datos previos, niños de todas las edades pueden infectarse y transmitir el virus fácilmente. La data proviene de un brote que se presentó en un campamento de verano en Georgia. Antes de entrar, campistas y personal presentaron su prueba negativa del Covid-19. Pero al segundo día de la temporada, uno de los niños comenzó con fiebre y dió positivo al virus. Inmediatamente llamaron a los padres a recoger al resto de los campistas. El reporte del CDC indica que de los 344 campistas y miembros del staff a quienes se les practicó después el test, 260 resultaron positivos a Covid-19. Esta evidencia enciende aún más el debate sobre la apertura de las escuelas.